Hacia una pastoral del café

Una de las cosas que más disfruto de mi día es el café… Frio, caliente, solo, cortado [con leche sin lactosa], expresso… Este libro me ayudó a saber disfrutar el acompañamiento tanto como disfruto mi café.

«El Reino De Dios, es como los muebles  de Ikea, lo tienes que montar tú. Así que coge tu llave Allen y vamos allá».

Hacia un Pastoral del café, Omar Villas, P.9

Del libro aprendí:

La palabra adolescente puede significar, según la RAE: ‘Caer enfermo o padecer alguna enfermedad’. ¡Nuestros Jóvenes en las parroquia no padecen ninguna enfermedad!

Un diccionario en latín nos puede decir que la palabra de «Ad Oleo» que se podría traducir cómo: ‘Agregar Fuego’ y así son nuestros jóvenes, vienen a mantener las comunidades, vienen a traer fuego a nuestras casas, parroquias, conventos…

¡Compartamos ese fuego!

Para pensar

El libro nos comparte muchas herramientas sobre cómo acompañar, por ejemplo la empatía. ¿Cómo vivo la empatía en mi vida cotidiana?, ¿Comprendo que es realmente la empatía, o solo la utilizo como una palabra de moda?

Este libro puede servir a toda persona que se está aventurando en el acompañamiento de un grupo de jóvenes, a catequistas, a profesores… ¿Te animas a aprender a acompañar a un joven?

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